VIDEO | Promesas vacías: Sheinbaum intenta frenar el gasolinazo con medidas de cartón
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Ante la alarma por los precios desorbitados de la gasolina, que en algunas zonas del país superan los 25 pesos por litro, el gobierno de Claudia Sheinbaum se apresura a anunciar medidas para evitar lo que ya muchos temían: un nuevo gasolinazo. Sin embargo, las promesas de la mandataria suenan más a excusas que a soluciones concretas.
Sheinbaum rechazó rotundamente cualquier aumento de precios y culpó a la Reforma Energética de 2013, que, según su discurso, dejó el precio del combustible sin control. Aunque no existe un precio máximo, asegura que no permitirá que las estaciones de servicio se aprovechen de la situación. Sin embargo, las medidas anunciadas parecen más bien un parche temporal. Tras sus constantes recorridos por el país, la mandataria reconoció que la gasolina magna ya ronda los 26 pesos, una cifra escandalosa que parece pasarle por encima.
🇲🇽⛽️💸#gasolinazo En un análisis de 10 países de más consumo de gasolina, México tiene el precio de combustibles más caro, pues se pagan $10 de impuesto por litro, y en EU sólo pagan $2.80, dijo @economiaoil en entrevista con @betogarciac11
— @MeganoticiasMx (@MeganoticiasMx) December 31, 2024
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Para "combatir" este aumento, Sheinbaum ordenó a Pemex y a la Secretaría de Energía (Sener) colaborar en un proyecto que, en teoría, buscaría regular los precios, aunque nada indica que eso sea posible dentro de los límites de la ley. La reciente subida del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) no hace más que incrementar el descontento, ya que el aumento estaba previsto desde hace tiempo y no parece que esto vaya a aliviar la carga de los mexicanos.
En su intento de justificar las medidas, Sheinbaum recordó que en el pasado, el IEPS fue usado para frenar el impacto de los precios del petróleo, como ocurrió durante la invasión rusa a Ucrania. Sin embargo, la falta de una respuesta efectiva ante el encarecimiento de la gasolina deja claro que la solución no está en manos del gobierno. Mientras la mandataria insiste en que el precio del petróleo no ha aumentado significativamente, los ciudadanos enfrentan una realidad bien distinta, con un precio de la gasolina fuera de control y sin un verdadero plan para aliviar la crisis.