Los ochenta países firmantes hicieron un llamamiento conjunto para que la “integridad territorial” de Ucrania sea la base de cualquier acuerdo de paz. La declaración subraya que la Carta de la ONU y “el respeto de la integridad territorial y la soberanía... pueden servir y servirán de base para lograr una paz global, justa y duradera en Ucrania”.

Viola Amherd, presidenta suiza y anfitriona del evento, destacó en la rueda de prensa final que la “gran mayoría” de los participantes estuvieron de acuerdo con el documento, lo que, según ella, “demuestra lo que puede conseguir la diplomacia”.

El presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, saludó los “primeros pasos hacia la paz” dados en la reunión, y afirmó que el comunicado conjunto sigue “abierto a la adhesión de todo aquel que respete la Carta de la ONU”.

Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Ejecutiva de la Unión Europea, señaló que la conferencia titulada “Camino hacia la paz” refleja que la paz no se logrará en un solo paso. “No ha sido una negociación de paz porque Putin no se toma en serio poner fin a la guerra. Insiste en la capitulación. Insiste en la cesión de territorio ucraniano, incluso territorio que hoy no está ocupado por él”, afirmó von der Leyen.

Los analistas consideran que la conferencia de dos días tendrá un impacto limitado en el fin de la guerra, ya que Rusia, el país líder en el conflicto, no fue invitado. Además, China, un aliado clave de Rusia, y Brasil no asistieron, ambos tratando de trazar rutas alternativas hacia la paz.

La reunión también trató de centrar la atención en la guerra en Ucrania, destacando tres temas principales en la declaración final: seguridad nuclear, seguridad alimentaria e intercambio de prisioneros y regreso de los niños secuestrados por Rusia.

La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, afirmó que estas cuestiones son “condiciones mínimas” para las negociaciones con Rusia, reconociendo que muchas otras áreas de desacuerdo entre Kiev y Moscú serán más difíciles de resolver.

El primer ministro de Qatar, Sheikh Mohammed bin Abdulrahman Al Thani, destacó los esfuerzos de su país en mediar para la reunificación de niños ucranianos con sus familias, lo que ha permitido reunir a 34 niños hasta la fecha.

El asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, subrayó la necesidad de un esfuerzo continuo y concertado de la comunidad internacional para abordar la situación en Ucrania. “Va a hacer falta que la comunidad internacional se centre en ello, no sólo las voces de Estados Unidos o Europa, sino también voces inusuales que digan que lo que Rusia ha hecho aquí es más que censurable y debe revertirse”, afirmó.

El gobierno ucraniano estima que 19.546 niños han sido deportados o desplazados a la fuerza, y la Comisaria rusa para los Derechos de la Infancia, Maria Lvova-Belova, confirmó que al menos 2.000 fueron sustraídos de orfanatos ucranianos.

El Primer Ministro de Montenegro, Milojko Spajic, expresó su profunda preocupación por los miles de niños ucranianos trasladados a la fuerza a Rusia o a territorios ocupados por Rusia, llamando a la acción para asegurar su retorno a Ucrania.